Artículo sobre la efectividad de la Musicoterapia en la Enfermedad de Alzheimer.
Según se indica en este artículo, en 2013 había 35 millones de personas que padecían la Enfermedad de Alzheimer y se predice que en 2050 esta cifra se triplicará. A la Enfermedad de Alzheimer hemos de sumarle otras demencias que cada vez están más presentes en la sociedad, al aumentar la esperanza de vida de las personas. Es por ello que es muy importante la investigación para intentar comprender mejor qué sucede en el cerebro y de qué manera se le puede ayudar a que no pierda su capacidad o, en todo caso, lo haga lo menos posible.
Precisamente con la investigación y la práctica se ha demostrado que la musicoterapia puede resultar una terapia complementaria muy beneficiosa para ayudar a que la evolución de la enfermedad sea más lenta, si el paciente se encuentra en fases iniciales y para mejorar su calidad de vida, si ya se encuentra en una fase avanzada.
La musicoterapia es efectiva en la mejora y/o estabilidad neuropsicológica, cognitiva y la capacidad de comunicación y socialización. Según se menciona en el artículo, a bajo coste. Esta afirmación se entiende si tenemos presente que la musicoterapia puede ayudar a disminuir la medicación del paciente y también las horas de atención por parte de profesionales. Importante tener en cuenta también que la musicoterapia puede ayudar y mucho a los familiares o cuidadores del paciente con Enfermedad de Alzheimer. Es conocido el desgaste físico y psicológico que sufren estos cuidadores y la musicoterapia puede ayudar a disminuir su estrés, ansiedad, fatiga y proporcionarles un espacio de autocuidado.
El estudio que aquí presentamos incluye una revisión de la literatura que incluye revisiones y revisiones sistémicas, relacionadas con musicoterapia y Enfermedad de Alzheimer. Incluyen artículos publicados en inglés o español entre enero de 2006 y octubre de 2016.
En los artículos revisados la musicoterapia siempre es implementada por un/a musicoterapeuta cualificado/a, el cual ha realizado su intervención siempre según las necesidades y capacidades del paciente. Para ello se han utilizado las siguientes técnicas:
- Técnicas receptivas: escucha de música en directo y grabada. En algún caso se hace referencia a una obra en concreto (la Sonata KV 448 de Mozart o el Canon de Pachelbel) y en otros casos la música se basa en las preferencias musicales del paciente.
- Cantar: los autores mencionan esta técnica como muy efectiva para la reminiscencia y revivir experiencias vividas. La emoción vivida tiene un importante papel en el proceso de memoria de la demencia.
- Técnica músico-verbal: el/la musicoterapeuta utiliza elementos musicales, como el ritmo o la melodía, para ayudar al paciente a recordar contenidos verbales. Se muestran estudios que indican que los textos cantados se recuerdan más que los no cantados.
- Fondo musical: se presentan algunos estudios donde se utiliza música de fondo en los tratamientos en demenciala memoria autobiográfica i reducir la ansiedad.
- Participación activa con música: en esta técnica se hace referencia a que el paciente participa activamente en una sesión que engloba elementos como cantar, bailar, movimientos rítmicos o tocar instrumentos.
- Estimulación multisensorial: aparece una tendencia a combinar los fármacos para la demencia con otras intervenciones que combinan diferentes estimulaciones cognitivas. En esta estimulación multisensorial tiene cabida la utilización de instrumentos musicales, pintar imágenes o la orientación espacio temporal, en pacientes con Enfermedad de Alzheimer leve.
Según la revisión aquí presentada, hay mucha literatura que demuestra que la musicoterapia puede reducir los síntomas de estado de ánimo y trastornos del comportamiento en las demencias (especialmente la ansiedad, la agitación o la depresión) pero no hay tanta investigación sobre los efectos que puede tener sobre los aspectos cognitivos de esas demencias.
Afortunadamente, parece que esta investigación tiene tendencia a aumentar en los últimos años y se demuestra que la musicoterapia también es efectiva en aspectos cognitivos en pacientes con Enfermedad de Alzheimer. Aspectos como la atención, la memoria, la velocidad psicomotriz, la orientación y las funciones ejecutivas, ayudando en la mejora de la neuroplasticidad cerebral.
A pesar de toda la literatura publicada sobre los beneficios que la musicoterapia puede suponer para los pacientes con Enfermedad de Alzheimer, los autores recomiendan más investigación, especialmente ensayos clínicos aleatorizados doble ciego y con la máxima rigurosidad científica, buscando no solo los efectos inmediatos a la intervención en musicotearapia sino también los efectos a largo plazo. También recomiendan empezar la intervención con musicoterapia en las primeras fases de la enfermedad para que sea más efectiva.